“Un sábado en que el entonces gobernador, Leonel Cota Montaño rindió en el salón principal para eventos sociales o políticos del Araiza Inn, una especie de mininforme a la base militante de su nuevo partido el PRD, al término de este, Carlos Moyrón Benton me presentó a Graco Ramírez Garrido Abreu, en ese momento, secretario de Elecciones del Comité Ejecutivo Nacional del PRD y quien asistió al evento.
Unos días antes le había comentado a Carlos que le envié un correo electrónico a Graco por un artículo que publicó en el diario Reforma y en el que criticaba a Fidel Castro, el sempiterno presidente de Cuba.
Me pareció un tanto sorpresivo que Graco Ramírez, un conocido militante de la izquierda mexicana, se expresara en términos no muy cordiales sobre Fidel Castro quien está al frente del gobierno cubano desde hace 47 años.
Graco, como muchos otros de su generación había sido un admirador de Fidel Castro desde que el hoy presidente cubano armó en México a su grupo de guerrilleros entre los que se incluía al mítico Ernesto Che Guevara, para irse a levantar la revolución en suelo cubano para liberarlo del yugo, no sólo del dictador Fulgencio Batista que gobernaba con mano dura Cuba, sino de la bota norteamericana que estaba sobre el cuello de todos los cubanos.
En su artículo de referencia, Graco condenaba prácticamente la postura de Fidel Castro con relación a un grupo de periodistas e intelectuales que fueron encarcelados por no estar de acuerdo con el régimen del gobierno cubano.
Por esos días, Graco también fue relacionado con los videoescándalos en los que se dio a conocer las relaciones perversas del empresario argentino Carlos Ahumada Kurtz con funcionarios del gobierno del Distrito Federal y con destacados miembros del CEN del PRD así como con la ex Jefa de gobierno, Rosario Robles.
Se le había señalado que recibió de Carlos Ahumada, 50 mil pesos, pero el controvertido político izquierdista aceptó el donativo y dijo que los había utilizado en campañas electorales. No hubo mayores problemas.
Hijo de un destacado militar –su hermano llegó a ser jefe de la policía del Distrito Federal-, Graco Ramírez ha tenido una trayectoria pública de claroscuros.
Pocos la conocen con certeza.
Cuando Carlos Moyrón nos presentó, le dijo que yo le había enviado un correo electrónico dándole mi opinión con respecto a lo que Fidel Castro representa hoy a casi 50 años de haberse convertido en el mítico dirigente del pueblo cubano que buscó independizarse del yugo norteamericano para caer luego del paso de los años en una dictadura ya no del proletariado como era el objetivo primario de llegar al poder sino del propio Fidel y su camarilla. Si lo leyó y recordó el apellido: Zamora”.
El tema viene a colación porque la semana pasada el hoy senador Graco Ramírez pidió un boleto para ir a Cuba a hablar con los disidentes que fueron encarcelados hace poco más de cinco años como presos de conciencia y que están protestando contra Fidel y Raúl Castro, gobernantes de la isla.
Hubo quienes pensaron que Graco Ramírez, al igual que otros legisladores perredistas se manifestó solidario con los Castro, pero en realidad es lo contrario pues el controvertido político y legislador federal está desencantado con lo sucedido en este medio siglo de gobierno comunista en Cuba.
Así lo manifestó en aquella fecha.
Por eso decidí recordar este columna.
Claro que lo que haga o deje de hacer el senador me tiene sin cuidado.
La lectura es vida, lo demás...es lo de menos...hzr@prodigy.net.mx
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