Temas y...los olvidados

“Por sus obras los conoceréis”.
Este precepto bíblico les queda como anillo al dedo a los diputados y diputadas federales de la actual Legislatura.
¿Por qué?
En este caso no tanto por la acción sino por la omisión.
¿Omisión?
Si: resulta que nuestras y nuestros legisladores se en su afán de reducir el gasto corriente del gobierno federal, en materia educativa, se olvidaron de de 170 mil niños y jóvenes con discapacidad y de unos 22 mil con necesidades especiales.
Caray, por eso luego dicen que al perro más flaco se le cargan más las pulgas.
Si de por sí esas niñas y niños, jovencitas y jovencitos sufren discriminación por sus condiciones físicas e intelectuales, todavía tienen que sufrir el desprecio y el abandono de quienes se dicen sus representantes populares en la cámara baja del Congreso de la Unión.
¡No es justo!
Pero, si como alguna vez lo comenté en este espacio, al principio de la actual XLI legislatura federal no había en el recinto de la Cámara de Diputados rampas para el desplazamiento de las personas con discapacidad y, lo peor de todo, ni para los propios legisladores que tienen alguna discapacidad como el caso de una paisana diputada federal por Durango, ¡que se pueden esperar nuestros hijos e hijas con alguna discapacidad!
¿Acaso olvidan nuestras y nuestros legisladores que ningún ser humano está exento de sufrir alguna vez en su vida, de alguna discapacidad?
Bueno, ya ven que ni Supermán se salvó.
No tanto el superhéroe del Comic norteamericano tan exitoso sino uno de los actores que encarnó ese papel en el celuloide, Christopher Reeves quien sufrió durante el rodaje de una película una caída de un caballo y quedo cuadrapléjico hasta que murió hace algunos años.
Saben que mis legisladoras y legisladores integrantes de la LXI legislatura federal, no la chi…flen, mejor cántenla.
Los encargados de elaborar, modificar y modernizar las leyes que rigen nuestra vida ciudadana, no pueden actuar con ese desdén por nuestros discapacitados y discapacitadas.
Son quienes más nos necesitan.
No podemos darles la espalda.
Aquí si cabe eso de que ¡Ya basta! de marginación, señor presidente Felipe Calderón.
Estoy de acuerdo en que deben aplicarse medidas de ahorro en el gasto del gobierno federal, pero hay otros rubros que se pueden castigar, reduciéndoles su presupuesto, pero en el caso de las niñas y niños, las jovencitas y jovencitos con alguna discapacidad, limitarles todavía más la posibilidad de que superen sus problemas físicos y emocionales, son más que chi…fladeras.
Según datos del INEGI en el país el 10 por ciento de su población padece alguna discapacidad, lo que es un elevado número de personas pues supera los 10 millones.
Por desgracia, en México todavía sigue habiendo mucha discriminación a tal grado que bien podría hacerse en estos tiempos un remake de aquella famosa cinta de Luis Buñuel, Los Olvidados.
¡Pobres nuestros discapacitados y discapacitadas, tan cerca de Dios y tan lejos de nuestras diputadas y diputados federales!
La lectura es vida, lo demás…es lo de menos…hzr@prodigy.net.mx