“Azul como una ojera de mujer.
Azul pintado de azul.
Esas melodías parece que están de moda en el estado de Guanajuato donde el gobernador Juan Manuel Oliva está pintando todo lo que hace de azul.
El azul es uno de los colores que lleva el escudo del Partido Acción Nacional.
Y el gobernador es militante de ese instituto político.
Pero ¿está bien que pinte las obras realizadas de azul?
No es el primero que recurre a esta estrategia.
Aquí en La Paz cuando Adán Enrique Ruffo Velarde fue presidente municipal bajo las banderas del PAN, también se dio vuelo pintando todo de azul.
Hasta las patrullas.
Hubo críticas al respecto y finalmente Ruffo dejó de pintar de azul su administración.
Hace unos meses la actual presidenta municipal de La Paz, Rosa Delia pinto de color rosa la ornamentación del paseo Alvaro Obregón de esta ciudad capital.
De nuevo las críticas se hicieron presentes y se abandonó esa estrategia.
Como gobernador, su hermano Leonel no pintó de amarillo y negro la entidad pero se dio vuelo pintando las guarniciones de las calles de color amarillo que es un color que lleva el logotipo del Partido de la Revolución Democrática.
En Veracruz, al actual gobernador Fidel Herrera Beltrán también le gusta pintar de rojo algunas de las acciones que realiza.
Reparte despensas en bolsas pintadas de rojo.
Ese color es uno de los tres que lleva el logotipo del Partido Revolucionario Institucional al que pertenece el Jefe Fidel.
El mensaje subliminal que estas acciones de los gobernantes, se entiende pero obliga a preguntarse si los gobiernos tienen colores.
Se supone que si bien es un partido político el que propone a los candidatos que son votados por la ciudadanía, una vez que ganen las elecciones empiecen a ejercer el cargo los colores partidistas no deben estar en los gobiernos porque se gobierna para todos, es decir, priistas, panistas, perredistas, etc.
¿O no?”
Hace tiempo escribí esta columna que decidí publicarla de nuevo porque en los últimos días el tema de los colores de los gobiernos ha sido abordado en los medios de comunicación porque aquí en la entidad gobiernan el PAN, el PRI y el PRD.
Yo creo que cuando un gobierno actúa no debe hacerlo en función de los colores con los que se identifican sus servidores públicos.
Ni siquiera de manera subliminal.
Se gobierna para todos.
Y mucho menos creo que deba pintarse el equipamiento urbano a tono con los colores del partido que gobierne.
“Ni rojo, mucho menos verde, confiamos en su color el azul el que usted representa dignamente”, le dijo Joel Alberto Ceseña al gobernador Marcos Alberto Covarrubias Villaseñor.
Esto todavía puede pasar porque así piensa un ciudadano y muchos más. Lo otro NO.
La lectura es vida, lo demás…es lo de menos…hzr@prodigy.net.mx
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