Temas y...¿legisladores extraterrestres?

Quienes van a las dos cámaras que conforman el Congreso de la Unión, la de Diputados y la de Senadores ¿serán seres extraterrestres, prototipos de otros mundos?
Digo, porque me da le impresión que, como alguna vez dijera aquel ex presidente orejoncito que tuvimos hace unos años, los legisladores y legisladoras federales, ni nos ven ni nos escuchan.
¿Por qué?
Porque se supone que ellos están allí para darnos y reformar, cuando así lo amerite, el marco jurídico que norma y regula nuestra condición de ciudadanos y ciudadanas de este país.
Lo peor de todo es que ellos son nuestros empleados y no se han dado cuenta.
O más bien, se hacen los occisos.
No tengo ni idea de cuántas veces he abordado este tema en este modesto espacio, pero debo confesar que, como alguna vez dijo el ex líder de ambas cámaras del Congreso de la Unión, Luis Marcelino Farías, no le encuentro la cuadratura al círculo.
Tal parece que de nada sirvió que las cámaras de Diputados y de Senadores, se conformaran con representantes de diversas ideologías políticas.
¿Salió peor el remedio que la enfermedad?
Tal parece que sí, pues revisando lo que ha ocurrido desde 1997, cuando el PRI perdió la mayoría simple en la Cámara de Diputados, no avanzamos.
Ya van casi 15 años y las tan llevadas y traídas reformas estructurales no aterrizan.
Los legisladores y legisladoras federales se culpan unos a otros de no apoyar esas reformas.
También los partidos políticos.
Y así estamos, inmersos en discusiones estériles que a nada conducen pero que mantienen paralizada a la nación en muchos aspectos.
Tal parece que a diputd@os y senad@ores no parece preocuparles lo que sucede.
Ellos cobran sus jugos sueldos, bonos y demás canonjías a las que tienen derecho y san se acabó.
Puede ser que no todos actúen y piensen de esa manera, pero para ubicarlos, es como buscar una aguja en un pajar
¿No tendrán familia?
¿No tendrán sentimientos?
¿No tienen sensibilidad?
A lo mejor lo que no tienen es madre.
Actúan como si nosotros para ellos no existiéramos.
Como si fuéramos un estorbo.
¡Qué envidia cuando llevan a cabo sus reuniones plenarias en hoteles de 5 estrellas y consumiendo ricas viandas y bebidas espirituosas de las caras! Habitaciones de 500 dólares la noche.
Todo va con cargo al erario.
A ellos se les debería descontar de sus sueldos los millones de pesos que se gastan en esas reuniones a las que algunos llevan hasta el perico.
Por eso el cuestionamiento de que si no serán seres de otros mundos.
A veces me convenzo de que tenía razón don Pedro Ferriz, padre, cuando decía que un mundo nos vigila.
Yo diría que esos extraterrestres ya están en este mundo y se apoderaron del Congreso de la Unión.
¿Qué podemos hacer nosotros humildes y mortales terrícolas mexicanos para neutralizarlos?
Dígalo, usted si tiene la respuesta.
La lectura es vida…lo demás…es lo de menos…hzr@prodigy.net.mx