“Yo propongo que asaltemos un banco”, dijo don Héctor Villarreal, en aquella reunión en la que nos preguntábamos cómo tener una noticia policiaca importante y sobre todo cómo llenar esa página de El Sudcaliforniano de finales de los 70`s.
Es obvio que nuestro entonces subdirector no hablaba en serio.
Con ello quería enfatizar lo difícil que era en aquellas épocas que aquí en La Paz o algún otro punto de la entidad se generara una noticia de la página roja con algo más que dramatismo.
Hoy, a más de 30 años de distancia, los hechos delictivos que ocurren cotidianamente bien pudieran llenar no sólo la Sección Policiaca de nuestro diario, que comprende al menos 6 páginas, sino muchas más.
Es el costo del progreso, dicen algunos.
Y debe haber algo de razón en ello puesto que ahora hay mucha más gente que hace tres décadas y por lo tanto los problemas son mayores y los hechos delictivos, en consecuencia, también.
Debo confesar que, a pesar de estar consciente de que es nuestro trabajo, nunca he estado de acuerdo en que a aquellas personas que supuestamente cometen un delito se les fiche de inmediato y se difundan sus datos para que sean publicados en los medios informativos.
No tengo un número preciso porque es difícil, pero son varios los casos de personas que han acudido a mi oficina como Jefe de Información de El Sudcaliforniano, porque fueron acusadas de determinado delito y que sus fotografías fueron entregadas y publicadas en nuestro medio de comunicación y que al final de cuentas resultó que no eran culpables, pero ya la quemada pública, nadie se las quita.
Por ello, he sido de la idea de que se divulguen los datos de un acto criminal hasta que se demuestre, jurídica y legalmente que así fue.
De esa manera no se lastima a quienes son inocentes, pero que de buenas a primeras ante la opinión pública, son unos criminales.
El tema viene a colación porque el viernes 22 de septiembre, se dio a conocer una noticia que merece todo mi apoyo y que tiene que ver con el tema que estoy abordando en este espacio.
Dice que prohíbe el proyecto de nuevo Código Federal de Procedimientos Penales, revelar la identidad de los detenidos.
Se trata de una iniciativa que promovió el presidente Felipe Calderón y que prohíbe a las dependencias de gobierno y a los propios abogados revelar la identidad de los detenidos, víctimas y demás personas relacionadas con un procedimiento penal.
Si bien la reforma del 2008 al Código Federal de Procedimientos Penales ya contemplaba algunos candados a la información de expedientes penales pues canceló la publicidad inmediata y total de las averiguaciones previas, incluso las concluidas, la iniciativa del jefe del Ejecutivo federal contempla en su artículo 135 prohibir a las partes, proporcionar datos a terceros sobre lo que sucede en un caso de esta naturaleza.
“Las audiencias serán generalmente públicas. Los tribunales podrán restringir la publicidad o limitar la difusión por los medios de comunicación cuando existan razones fundadas para justificar que se pueda perjudicar el normal desarrollo del proceso, la seguridad nacional, la seguridad pública, la protección de las víctimas u ofendidos, de testigos o de menores de edad, cuando se ponga en riesgo la revelación de datos legalmente protegidos o cuando el juez estime que existen razones fundadas para justificarlo”, precisa la iniciativa.
Podrá haber quien argumente que en el fondo habría un intento de limitación a la libertad de expresión y eso habría que analizarlo más a fondo, pero lo que me agrada es que si alguien es acusado de un delito que no cometió o comete un delito imprudencial, no tenga que publicarse su fotografía ni sus datos generales en los medios.
Ora sí que como bien dijo Vicente Fox: las buenas noticias, también son noticia.
La lectura es vida, lo demás…es lo de menos…hzr@prodigy.net.mx
No hay comentarios:
Publicar un comentario