A la mejor tiene razón, el gran acto Héctor Bonilla con eso de que los ciudadanos y ciudadanas de este país ya estamos hartos de la forma como nos han gobernado hasta ahora.
Pero yo le diría a este experimentado histrión, que también ya estamos hartos de ver su anuncio en la televisión y todos los demás que se refieren al proceso electoral del primer domingo del mes de julio, día y noche. La neta es que enfadan.
Está bien que lo que se busca es crear conciencia en nosotros para que participemos con nuestro voto en esa elección en la que se votará para presidente o presidenta de la república, senadores y diputados federales además de que en al menos 15 entidades habrá elecciones locales, en algunas para gobernador y en las demás para presidentes municipales y diputados locales.
Sin embargo, con todo y ese titipuchal de sopts de radio y televisión con el que a diario nos bombardean durante meses, no se logra que todos los que estamos registrados en el padrón electoral o en la lista nominal, vayamos a votar.
Yo no sé quién le diría a los consejeros del Instituto Federal Electoral que con esos cientos de miles de mensajes en la TV y en la radio, crecerá el número de votantes.
Para la elección del primer domingo del mes de julio próximo se estima que acudirá un poco más del 50 por ciento y los más optimistas hablan de que la afluencia de votantes ese día podría superar la franja del 60 por ciento.
De todas maneras, es lamentable que las credenciales de elector no se utilicen para votar y muchas personas las usen como identificación oficial, exclusivamente.
El voto en México, según las estadísticas al respecto, es de los más costosos del mundo.
Y, aunque estoy de acuerdo en que tengamos democracia y libertad de elegir a quienes deben gobernarnos, es lamentable que se desperdicie tanto dinero de esa manera cuando tenemos casi 60 millones de pobres y las estampas esas de la Taraumara, que no son las únicas porque también las hay en Guerrero, Oaxaca y otros estados muy jodidos.
Por si fuera poco, nuestros consejeros electorales nos demuestran lo solidarios que son con este país asignándose un bono de 400 mil pesos bajo el argumento de que trabajaron mucho estos últimos meses –más de un año- porque no se nombró con oportunidad a los tres consejeros que contempla la Ley Orgánica del Instituto Federal Electoral para su Consejo General.
¿Y los tres consejeros que apenas se integraron hace unas semanas al Consejo General del IFE, también trabajaron mucho? Digo, porque van a cobrar el bono.
Es más, Lorenzo Córdova a quien le tengo respeto y reconocimiento por sus conocimientos sobre temas electorales, dijo que ese bono está establecido desde siempre y que no es sólo para los consejeros generales sino para todos los que trabajan en el IFE, aunque claro, sólo los nueve consejeros generales cobrarán 400 mil pesos cada uno.
Eso independientemente de otros bonos que cobran a lo largo y, sobre todo, el fin de año.
Además, por si fuera poco, ahora se les asignarán autos de lujo blindados a cada uno de los nueve consejeros generales para su protección, no vaya a ser la de malas que los malandrines se les ocurra intentar secuestrarlos o mandarlos con San Pedro.
Y como colofón la noticia de que del 2007 al 2010, el IFE, según la Contraloría interna, solicitó 400 millones de pesos extras cada año para contratar ¡fantasmas!
No sé que opine de todo esto el veterano actor Héctor Bonilla, pero es un hecho que miles de ciudadanos y ciudadanas, como dijera Chente Fox, ya están hartos de tanto mensaje electoral.
P:D: Cuando terminaba la columna me enteré que el IFE canceló en 21 estados este spot. BCS no está entre ellos.
La lectura es vida, lo demás…es lo de menos…hzr@prodigy.net.mx
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