Hay noticias que provocan coraje.
Una ellas es la que dice que a la empresa PepsiCo la Comisión Federal de Electricidad le perdonó más de 100 millones de pesos de una deuda de dos de sus factorías en nuestro país.
¿Será cierto?
Es mucho dinero.
Y está bien que se apoye a las empresas cuando enfrentan alguna crisis económica porque son generadores de empleos, servicios e impuestos.
Pero cuando se trata de empresas transnacionales como la referida que ganan miles de millones no de pesos sino de dólares al año, como que ya no puede uno aprobar ese tipo de apoyos.
Y es que, por ejemplo, cada verano tengo que pedir a los encargados de la caja de ahorros del periódico, que me descuenten vía nómina desde junio, un préstamo que me harán efectivo hasta septiembre para poder enfrentar el cobro más alto del año que llega por consumo de energía eléctrica.
De otra manera, tendría que desajustar el presupuesto familiar para poder enfrentar esos compromisos económicos.
Que, de no ser por el subsidio que aplica el gobierno federal a las tarifas por consumo de energía eléctrica en los hogares mexicanos, la cantidad sería mucho mayor.
Aun así he sabido de muchos casos de conocidos a los que les han llegado en esas fechas los recibos hasta por 15 ó 20 mil pesos.
¡Imagínese lo que tienen que hacer para pagar o correr el riesgo de que se la corten!, la luz, desde luego.
Durante las recientes campañas presidenciales la candidata y candidatos postulados por los partidos políticos hablaron del tema de las tarifas eléctricas.
El virtual ganador de la elección, Enrique Peña Nieto se comprometió a reducir el costo de las mismas.
¿Lo hará durante su gobierno, si el TEPJF lo ratifica como vencedor de la contienda electoral del pasado uno de julio?
No está fácil.
Vicente Fox y Felipe Calderón lo intentaron, pero no le encontraron la cuadratura al círculo.
Es cierto que apoyaron a los habitantes de la frontera norte, con tarifas más bajas, pero no más.
Repito no es un asunto sencillo.
Aun con todo y que Andrés Mannuel López Obrador también hablaba del tema e insistía en que bajaría las tarifas pues él sabía cómo hacerlo.
¡No son enchiladas!
Pero si sería justo y necesario que se redujeran las tarifas porque el problema es que los salarios no alcanzan para cubrir ese servicio y los demás que nos vemos obligados a utilizar todo el año.
En el inter que falta para que Enrique Peña Nieto tome posesión de su cargo, podría analizar con especialistas, el tema de las tarifas eléctricas.
Buscar la solución más viable pero que no afecte ni las finanzas del gobierno federal ni tampoco que sigan siendo como sanguijuelas para nosotros los usuarios del servicio de la energía eléctrica.
Si a una empresa tan autosuficiente económicamente como PepsiCo se le perdonaron 100 o más millones de pesos, eso quiere decir que si se puede alcanzar un punto de equilibrio y que el consumo de energía eléctrica ya no siga siendo tan caro para los mexicanos.
Como dice el dicho: O todos coludos o todos rabones.
¿No cree usted?
La lectura es vida, lo demás…es lo de menos…hzr@prodigy.net.mx
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