Desde hace varios meses me da la impresión de que el actual gobernador de Puebla, Moreno Valle ambiciona llegar a Los Pinos y al Palacio Nacional.
Está en todo su derecho.
Como ciudadano mexicano, tiene derecho a votar y ser votado.
No confundir con botado, que en algún momento podría ocurrir, pues en ese ambicioso proyecto de ocupar en el 2018, la silla que hoy calienta el presidente Enrique Peña Nieto, el mandatario poblano está cometiendo algunos excesos y atropellos que se van acumulando, igual que en el Melate.
Y me late, que los poblanos enojados con su manera de gobernar y de actuar, lo pueden botar de la titularidad del Poder Ejecutivo del Estado.
El proyecto más reciente que se le ocurrió al gobernador poblano para llamar la atención, no sólo nacional sino internacional, es la instalación de una rueda de la fortuna gigantesca, un tanto similar a la que opera en la capital de Inglaterra, Londres y que, ya se está convirtiendo en un icono emblemático de esa flemática ciudad, como el Big Ben o el Palacio de Buckingham.
Pa mi que la que va a ser una fortuna gigantesca, será la del mandatario después de que termine su periodo. México es famoso por producir comaladas sexenales de ricos.
En Puebla, el gobernador panista, que antes era priista, y que trae la sangre política en las venas, pues su abuelo también gobernó a los poblanos hace ya algunos ayeres, quiere instalar la rueda de la fortuna en una escuela de la capital, famosa por sus cientos de iglesias coloniales, su mole, su talavera y sus chiles en nogada.
Sin embargo, los padres de familia de esa institución educativa ya pusieron el grito en el cielo pues ven un tanto peligrosa para sus hijos y para los vecinos de la escuela, la famosa ruedota de la fortuna y han manifestado que no apoyarán el proyecto de su gobernador.
Moreno Valle suele hacer las cosas en grande para que la nación lo conozca y lo identifique bien a la hora en que tenga que disputar, primero, la candidatura y luego la elección presidencial.
Me supongo que por el PAN, pero si no es por ese partido, podría ser por otro, al fin y al cabo que ya demostró que la fidelidad ideológica no va con él.
Para las invitaciones de sus informes de gobierno, el mandatario poblano, no escatimó en gastos, pues fueron impresas a todo lujo y además invitó hasta las piedras.
También la celebración y recreación de la Batalla del 5 de Mayo, estuvo a todo lujo y con proyección nacional e internacional y es muy probable que esa película sobre ese hecho histórico en el que el desarrapado ejército mexicano le propino una derrota parcial al entonces considerado el mejor ejército del mundo, el francés, el gobierno estatal de Puebla la haya financiado.
Moreno Valle siente que en el PAN no hay mucha tela de donde cortar para el 2018 y por ello se está proyectando como un aspirante con posibilidades de dar la pelea para recuperar la presidencia que los panistas detentaron durante la llamada Docena Trágica.
Pero que lo haga con recursos propios y no con los públicos.
¿Lo hará?
¡Qué iluso! ¿no?
La lectura es vida…lo demás…es lo de menos…hzr@prodigy.net.mx
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