jueves, 26 de junio de 2014

Temas y...el suicidio truncó su carrera

Tal vez a muchos de los lectores o lectoras de este modesto espacio, no les diga nada el nombre de Kurt Cobain.
Pero para los que nos asumimos como melómanos o con un gusto enorme por la música en todos sus géneros, sabemos que ese nombre pertenece al que fuera cantante del grupo musical de origen estadounidense, Nirvana.
Y viene a colación el tema porque, precisamente, este año se cumplen 20 de que el vocalista y líder de esa agrupación musical decidió escapar de este mundo por la puerta falsa, mejor conocida como el suicidio.
El 5 de abril de 1994, Kurt Cobain, se metió en el cobertizo de su casa ubicada en Seattle, Washington, fumó un par de cigarrillos, se inyectó heroína y luego introdujo el cañón de una pistola en su boca y activó el gatillo, muriendo instantáneamente.
Los expertos en el tema, aseguran que Cobain era algo así como la reencarnación de los Beatles John Lennon y Paul McCartney juntos. Que podría haber sido también, el sucesor de Boy Dylan.
Con su grupo, Nirvana marcó a toda una generación y su fama se catapultó después de su trágico fallecimiento.
Incluso, se sabe que en 2006, Kurt Cobain superó al mítico Elvis Presley en la lista de los muertos que más dinero ganan, dentro del ámbito artístico mundial en lo que a ventas de discos se refiere.
Cobain era un fanático admirador de Neil Young un cantautor de la década de los 60-70´s, de origen canadiense y que, seguramente, muchos setenteros recordarán por aquel éxito Heart of Gold (Corazón de oro) que lo catapultó como solista a nivel internacional ya que había sido integrante de los grupos musicales Buffalo Springfield y de Crosby, Stills, Nash and Young.
Neil Young  es de los pocos que han ingresado al salón de la fama del Rock and Roll, 2 veces: en su calidad de músico de grupo y como solista. Está considerado como el segundo más influyente después de otra leyenda viviente de la música estadounidense: Bob Dylan.
Y algo que identificaba a Young y Cobain era el hecho de que no gustaban de los homenajes ni de la fama.
Hace unos meses, Young declaró en una entrevista periodística que para él, recibir homenajes, le genera un sufrimiento indescriptible y que por ello no los acepta.
A Kurt Cobain le sucedía algo similar y eso lo reflejaba en sus canciones. Era un tipo sencillo y nada protagónico. Sus canciones hablan de amores rotos, violencia, drogas y desesperanza.
Para Neil Young la muerte de Kurt Cobain fue un golpe demoledor. Grabó un álbum  para rendirle tribuno como un homenaje al líder de Nirvana: Sleeps With Angels (Duerme con Angeles) y dice que todavía se pregunta qué hubiera pasado si el malogrado cantautor hubiera hablado con él antes de tomar la fatal decisión de quitarse la vida, de un balazo.
“Se por lo que estás pasando, pero no es tan malo. Sólo pestañea y pasará. Todo va a pasar bien. Tienes muchas otras cosas que hacer. ¿Por qué no te tomas un tiempo? No te preocupes por todos esos pendejos que quieren que hagas lo que no deseas. Diles que se jodan y que se mantengan lejos”.
Esas palabras se las habría expresado Young a Cobain, si hubiera habido oportunidad y tal vez no estaríamos conmemorando el vigésimo aniversario de la muerte del guitarrista y vocalista de Nirvana, pues podría haberle hecho caso y olvidarse del suicidio.
“Casi la tuve, pero no sucedió”, dijo el cantautor canadiense.
Descanse en paz, Kurt Cobain.
La lectura es vida, lo demás…es lo de menos…hzr@prodigy.net.mx



No hay comentarios:

Publicar un comentario