Hay quienes dicen que
vivir en democracia plena, no tiene precio.
Y podría yo estar de
acuerdo con ello, pero tiene sus asegunes.
Pregunto: ¿Qué haya
más partidos políticos, en este país es garantía de democracia?
El próximo año, por
primera vez los electores de este país tendrán 10 opciones políticas para
emitir su sufragio en las urnas el domingo 7 del mes de junio.
Aunque en realidad
algunas de esas opciones son un tanto similares y lo más seguro es que se
registre más de una alianza electoral entre varios de los partidos que ya
tienen registro, siete de ellos definitivo y tres en la búsqueda de ese
objetivo.
Yo soy de la idea de
que en realidad, en México, con tres partidos políticos con registro nacional
sería más que suficiente y que son los que tienen mayor militancia en estos
momentos: el Partido Revolucionario Institucional, PRI, el Partido de la
Revolución Democrática, PRD y el Partido Acción Nacional, PAN.
Y es que fíjese que
para las elecciones del próximo año, que serán concurrentes, es decir juntas
las federales y las estatales, el gasto estimado para conducirlas rondará ¡los
25 mil millones de pesos!
Si leyó usted bien:
VEINTICINCO MIL MILLONES DE PESOS.
Tan solo el Consejo
General del Instituto Nacional de Elecciones está solicitando la aprobación por
parte del Congreso de la Unión de un presupuesto de 19 mil 474 millones de
pesos.
A ello habría que
agregarle lo que tendrán que desembolsar los gobiernos estatales para los
procesos electivos locales y que representan otra millonada.
A mi me parece que es
mucho dinero y que además, debemos recordar que las elecciones federales son
cada 3 años.
De ese dinero que está
solicitando el INE, al menos casi 6 mil millones de pesos se contemplan como
prerrogativas para los partidos políticos, es decir bajo el esquema del
financiamiento que, por ley, se les otorga.
¿Cuánto de ese dinero
irá a parar a las cuentas personales de quienes lideran los partidos políticos?
Experiencias al
respecto ha habido ya con otros partidos que crecen al calor de la contienda
presidencial y luego desaparecen porque no tienen el favor del electorado, pero
los promotores o quienes los dirigen, se llevan la tajada del león y ni quién
les exija que rindan cuentas.
Allí está por ejemplo
el desaparecido Partido de la Sociedad Nacionalista.
También, debería
aplicarse una revisión más a fondo de la manera en que se utilizan esos enormes
recursos financieros al interior del propio Instituto Nacional Electoral,
porque ya es un secreto a voces que hay un exceso de personal y que se han
hecho transacciones de compra de bienes inmuebles o de mobiliario, papelería y
otros insumos, con precios inflados y, en algunos casos, sin los documentos
fiscales que amparen esas compras.
Es buena la
democracia, sí.
Pero ¿es bueno que
haya tanto partido político?
La respuesta debe ser
meditada, desde luego.
Pero no perdamos de
vista que algunos partidos se han convertido en una especie de fuente de
riqueza para quienes los dirigen y que son dirigidos por en lideres sempiternos
o que se heredan los liderazgos nacionales y que hay casos en que todo queda en
familia.
¡Recórcholis!
La lectura es vida, lo
demás…es lo de menos…hzr@prodigy.netmx
No hay comentarios:
Publicar un comentario