viernes, 26 de febrero de 2010

Silvia Vargas, Daniela y la Navidad

Ironías de la vida.
Mientras que Nelson Vargas gritaba a todo pulmón que Dios lo había abandonado, la jovencita Daniela –así sin apellidos- le decía a los televidentes del Canal 2 que Dios la había salvado.
El ex servidor público que tuvo a su cargo todo lo relacionado al deporte en el sexenio de Vicente Fox, habló con un dolor profundo en el alma, de que Dios los había abandonado a él y los integrantes de su familia, luego de que después de un año y varios meses, no se sabía nada de su hija, Silvia que fue secuestrada.
Dijo Nelson Vargas:
“Alguna vez dije una gran estupidez y me dan ganas de volverlo a decir...Dios se ha olvidado de nosotros”.
Luego soltó el llanto y todo quedó en silencio.
Sin duda que el dolor de un padre abatido por la desgracia de perder a una hija fue lo que provocó que se expresara de esa forma.
Después, su esposa Silvia Escalera, recibiría en la página de su blog en la web mensajes que hablaban de que Dios no nos abandona nunca.
La noche del sábado durante la transmisión del Teletón de Televisa, se conoció el caso de una jovencita, Daniela que se accidentó en un vehículo y que salvó la vida de milagro aunque quedó con secuelas que no le permiten hablar ni desplazarse normalmente.
Ella nos dio una verdadera lección de superación, de solidaridad y de amor a la vida.
Aportó el primer sueldo que recibió como maestra que ahora da clases en el gimnasio al que acudía como alumna cuando la vida le sonreía y nadie pensaba que algún día llegaría allí con su desgracia a cuestas.
Daniela no creía en Dios, pero ahora, luego del lamentable accidente que cambió su vida, y la de sus familiares, cree en él.
Silvia Vargas Escalera, desapareció.
Es probable que los restos encontrados en una casa de seguridad allá en el DF sean de ella.
Por ello, Nelson Vargas, su padre cree que Dios los abandonó.
Daniela estuvo a punto de perder la vida y si bien no recuperó totalmente su salud, recibió una segunda oportunidad.
Para ella, Dios está presente en su vida.
Como esta es la última columna del año y se acerca la Navidad y el Año Nuevo, quiero repetir de nuevo lo siguiente:
“La historia cuenta que hace tiempo un hombre castigó a su hija de 5 años por desperdiciar un rollo de papel dorado para regalos. Estaban muy mal de dinero y se molestó mucho cuando la niña pegó todo el papel dorado en una cajita que puso debajo del árbol de Navidad.
Sin embargo, la mañana de Navidad, la niña le trajo la cajita con el papel dorado envuelta, a su padre, diciendo:
´Esto es para tí, Papá´.
El padre se sintió avergonzado por haberse molestado tanto la noche anterior, pero su molestia resurgió de nuevo cuando comprobó que la caja estaba vacía y le dijo en tono molesto:
´No sabe usted señorita que cuando uno da un regalo debe haber algo en el paquete?´
La niña enjugando las lágrimas le dijo:
´Pero papi, no está vacía le puse besitos ¡hasta que se llenó´!
El padre entonces, conmovido, tomó en brazos a la niña y pidió que le perdonara su horrible manera de proceder.
Un tiempo después, un accidente se llevó la vida de la niña y el padre conservó la cajita dorada junto a su cama por el resto de su vida.
Cuando se sentía solo y desanimado metía su mano a la cajita y sacaba un beso imaginario de ella...
En un sentido muy cierto, todos nosotros los humanos hemos recibido una cajita dorada llena de amor incondicional y besitos de nuestros hijos, familia amigos...No hay regalo más precioso que uno pueda recibir.”
¡Feliz Navidad y Prospero Año Nuevo 2009!...
La lectura es vida, lo demás...es lo de menos...hzr@prodigy.net.mx

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