Dice el famoso Alan Greenspan en el libro sobre sus memorias que fue un error para México la nacionalización del petróleo por Lázaro Cárdenas del Río en 1938.
¿Usted qué piensa?
Los primeros que se han rasgado las vestiduras son los adoradores de Tata Lázaro y todos aquellos que consideran esa decisión como un acto de heroísmo y acendrado patriotismo.
¿De verdad fue más negativa que benéfica la nacionalización del petróleo?
Todo depende del cristal con que se mire.
Los que defienden a pie juntillas esa histórica acción de Lázaro Cárdenas, dirán que la de Alan Greenspan es la de un hombre que representa los más oscuros intereses del capitalismo.
Y que no es quién para opinar al respecto.
Pero lo dicho por Greenspan en su libro debe movernos a la reflexión.
¿Cuánto dinero ha generado Petróleos Mexicanos desde 1938 a la fecha?
Miles y miles de millones de dólares.
¿Cuánto de ese dinero ha ido a parar al bolsillo o cuentas bancarias particulares de los ex presidentes, secretarios de energía, directores de la paraestatal y líderes petroleros?
Nomás por recordar en estas fechas, el inefable ex líder petrolero Salvador Barragán Camacho, se daba el lujo de perder en el periodo de las fiestas patrias, apostando, allá en los casinos de Las Vegas hasta un millón de dólares por noche.
¿Fue un acto de populismo la decisión de Cárdenas?
Eso es lo que asegura Alan Greenspan en su libro.
Pero para muchos mexicanos fue una decisión que evitó que las grandes empresas petroleras transnacionales inglesas y norteamericanas siguieran explotando a miles y miles de trabajadores llevándose todas las ganancias a sus países de origen.
El tema es complejo, sin duda alguna.
Y nos pasaríamos días y días discutiendo al respecto.
Lo que si no podemos soslayar es que el señor Greenspan tiene razón en lo que dicen con respecto a que si PEMEX no se abre a la inversión extranjera para realizar nuevas exploraciones profundas en busca de petróleo, la empresa se irá al colapso financiero y con ello también se afectaría en grado sumo la economía del país, pues el 60 por ciento de los ingresos de esa paraestatal van a parar a las arcas del gobierno federal.
Nos convertiríamos automáticamente de exportadores a importadores de petróleo.
El problema es que PEMEX ha sido y sigue siendo un tema tabú en la política mexicana.
El presidente Luis Inacio Lula Da Silva ya ofreció apoyo para establecer un convenio que permita que su empresa PETROBRAS pueda realizar perforaciones profundas en el Golfo de México en busca de Petróleo.
Pero hay que destrabar una serie de asuntos legales.
Empero, el tiempo avanza y las reservas probadas apenas alcanzan para 10 años a lo máximo.
Por eso dice Alan Greenspan que PEMEX se tambalea.
¿Quiénes tienen la responsabilidad de poder cambiar el marco legal que regula la operación de Petróleos Mexicanos?
Desde luego que los legisladores federales, es decir los diputados federales y los senadores, pero también es necesaria la voluntad del presidente en turno, en este caso de Felipe Calderón Hinojosa.
¿Tomarán esa decisión? Ya veremos...
La lectura es vida, lo demás es lo de menos...hzr@prodigy.net.mx
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