martes, 20 de abril de 2010

Temas y...carta

Esta ocasión, le cedo el espacio de Temas y sucesos a una estudiante del Tec de Monterrey Campus Guadalajara y que es nativa de esta ciudad de La Paz, a fin de que pueda dar cabal cumplimiento a tareas que le fueron encomendadas como parte de su formación profesional en esa institución de educación superior de tanto prestigio en el país y también como un tributo a la memoria de los estudiantes José Antonio Mercado Alonso y el todosanteño Javier Francisco Arredondo Verdugo.

“Si no hay café para todos, no hay café para nadie”
Ilse Rodríguez.


Todos los seres humanos, por el simple hecho de haber nacido como tales, tenemos derechos y obligaciones, las cuales en ocasiones, son ignoradas o son pasadas por alto por las demás personas.
¿Cuántas veces ignoramos nuestras obligaciones? Ya sea como hijo, estudiante, padre o incluso como ciudadano, esto es muy común en nuestra sociedad actual. Por otro lado, ¿a quién no le molesta cuando nuestros derechos son pasados por alto?

Todos los días vivimos rodeados de injusticias, por ejemplo: cuando un maestro nos pone una calificación que no nos corresponde, cuando nuestros papás nos llaman la atención por algo que no hicimos o hasta por situaciones más complejas, como cuando hay un choque en el cual el de mejor carro, que por dar una gran mordida, se convierte en víctima de la situación.
Sucesos como estos se presentan cada día, en todos los grupos sociales y nadie está excluido de ellas. Por esto, es necesario que, como seres humanos, seamos capaces de alzar la voz y reclamar por nuestros derechos, así como respetar los de los demás.

Actualmente vivimos en una sociedad a la que le es muy difícil aceptar todo aquello que no le es propiamente conocido o permitido, emitiendo juicios de opinión que tienden a rechazar dichos casos; el más claro ejemplo de esto es: “los derechos de los homosexuales”.

Aunque para muchos sea muy difícil permitir nuevas costumbres e ideales, la sociedad actual está cambiando, ya que cosas que antes no estaban permitidas o estaban mal vistas, hoy en día son tan comunes, que pasan por desapercibidas.

Algunos podrán argumentar que va en contra de lo natural, otros, que en nuestra religión no está bien visto. Sin embargo, soy de los que opinan que todos los seres humanos somos iguales y tenemos la misma libertad de decidir qué es lo mejor para nosotros. Por lo tanto debemos demostrar más tolerancia en cuanto a uniones entre parejas del mismo sexo

Los homosexuales son seres humanos, como tú y como yo, por lo tanto merecen la misma oportunidad de ejercer sus derechos y preferencias libremente. Probablemente no estés de acuerdo con su forma de pensar y de sentir, pero tenemos que tolerarlo porque, como lo mencioné anteriormente: ¿a quién le gusta que pasen por alto sus derechos?

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